Fuente: web catolica de Javier
La labor misionera es sólo un pequeña muestra de la titánica historia de la evangelización protagonizada por los misioneros que a lo largo de tantos siglos han puesto en marcha un desarrollo integral del hombre.
El anuncio del Evangelio no puede desligarse de la promoción humana del hombre y por eso lo misioneros se han convertido er los verdaderos protagonistas de desarrollo de estos pueblos. Han sido elegidos y enviados a servir a los demás, no son meros gestores de obras sociales. Enseñan en las escuelas, sanan en los hospitales, promocionan a la mujer en los países donde están completamente olvidadas y relegadas, se encargan de miles de niños abandonados, huérfanos y víctimas de conflictos armados, se trasladan a los campos de refugiados, acompañan y trabajan por esos grandes olvidados de la historia que son los pobres.
Sus vidas, como la de Jesús, representan un compromiso. Han comprometido sus vidas con los más pobres, con los que no tienen, con los que no pueden alzar su voz, con los que no saben, con todos aquellos a los que las sociedades más avanzadas han convertido en números estadísticos.
Un famoso periodista los definió como obstinados, audaces, abnegados... hombres y mujeres llenos de coraje y entrega que se encuentran siempre en los lugares más castigados del planeta, en cada uno de los infiernos que se abren sobre la faz de la tierra. Hombres y mujeres sencillos que luchan como humanamente pueden contra las consecuencias de luchas políticas o intereses económicos que les son ajenos, poniéndose siempre del lado de los más pobres, cumpliendo su vocación y la llamada de la misión fuera de su patria.
Los catequistas, los religiosos, los párrocos, los animadores misioneros y todos en general debemos hacer que niños, jóvenes y adultos vean la importancia de la labor de los 25.000 misioneros españoles repartidos por todo el mundo y que descubran que estamos ante los 2000 años de la primera misión de la Iglesia.
Todos estamos llamados a ser misioneros en este Tercer Milenio siguiendo el ejemplo de Santa Teresita de Lisieux, San Francisco Javier y tantos otros misioneros santos que ha dado la historia de las misiones.
Como de costumbre, la Agencia Fides publica al final del año la lista de los agentes pastorales que han perdido la vida en modo violento durante los últimos 12 meses. Según las informaciones que tenemos, en el año 2012 han sido asesinados 12 agentes pastorales, casi todos sacerdotes, se trata de 10 sacerdotes, 1 religiosa, 1 laica.
Por cuarto año consecutivo, con el mayor número de agentes pastorales asesinados, en primer lugar se encuentra AMÉRICA, bañada por la sangre de seis sacerdotes. Le sigue ÁFRICA, donde fueron asesinados tres sacerdotes y una religiosa. Después ASIA, donde encontraron la muerte un sacerdote y una laica.
Como sucede desde hace tiempo, el recuento de Fides no hace referencia sólo a los misioneros ad gentes en sentido estricto, sino a todos los agentes pastorales muertos de forma violenta. Con respecto a estos solo usamos el término “mártires” en su sentido etimológico de “testigo”, para no entrar en mérito al juicio que la Iglesia podrá eventualmente dar sobre algunos de ellos, y también por las pocas noticias que, en la mayor parte de los casos, se logran recoger sobre su vida e incluso sobre las circunstancias de su muerte.
La mayor parte de los agentes pastorales asesinados en el 2012 ha perdido la vida a raíz de intentos de robo: algunos sorprendieron a los ladrones en su casa y sus cuerpos fueron encontrados con signos de haber sufrido tortura y crueldad. Otros fueron atacados en la calle y despojados de todo lo que tenían consigo o de su coche. La Hermana Liliane Mapalayi, fue apuñalada hasta la muerte mientras se encontraba en su puesto de trabajo en un instituto dirigido por su congregación, donde era la ecónoma.
Don David Donis Barrera fue agredido y apuñalado, después de un accidente leve, tras un altercado con los ocupantes del otro coche. Don Anastasio Nsherenguzi fue asesinado por unos jóvenes que estaban tratando de dividir durante una pelea. La laica Conchita Francisco recibió varios disparos de frente a la Catedral de Bongao, en el sur de Filipinas, donde se vive una gran tensión por la presencia de los rebeldes musulmanes, piratas, terroristas y criminales.
Como escribía el Santo Padre Benedicto XVI en el Motu Proprio “Porta fidei”, con el que convocó el Año de la fe que la Iglesia está celebrando, “Por la fe, hombres y mujeres han consagrado su vida a Cristo, dejando todo para vivir en la sencillez evangélica la obediencia, la pobreza y la castidad, signos concretos de la espera del Señor que no tarda en llegar. Por la fe, muchos cristianos han promovido acciones en favor de la justicia, para hacer concreta la palabra del Señor, que ha venido a proclamar la liberación de los oprimidos y un año de gracia para todos. Por la fe, hombres y mujeres de toda edad, cuyos nombres están escritos en el libro de la vida, han confesado a lo largo de los siglos la belleza de seguir al Señor Jesús allí donde se les llamaba a dar testimonio de su ser cristianos: en la familia, la profesión, la vida pública y el desempeño de los carismas y ministerios que se les confiaban”. (PF, 13)
Los Agentes pastorales asesinados en el año 2012 no han realizado actos sensacionalistas, no se han puesto en el centro de la atención de los medios de comunicación por proyectos o toma de posiciones espectaculares, sino que simplemente “han confesado la belleza de seguir al Señor Jesús donde eran llamados a dar testimonio de sus ser cristianos”.
Ellos vivieron su fe en la humildad de la vida cotidiana, especialmente en el contexto de la pobreza humana y espiritual, la degradación, la violencia, donde el respeto por la vida y la dignidad humana son valores que no se tienen en cuenta, tratando de llevar en estos ambientes su testimonio de amor, de ese amor del Padre que Jesucristo ha venido a mostrar.
El 26 de diciembre, el Papa Benedicto XVI ha recordado en el Ángelus que el martirio del diácono Esteban muestra que “el nacimiento del Hijo de Dios inauguró para la humanidad una nueva era, la del amor. El amor hace caer las barreras entre las personas. Nos hace hermanos...”. Después ha puesto bajo la intercesión de San Esteban a los cristianos perseguidos, pidiendo y orando por ellos, invitando a “perseverar sin temor en el testimonio de la fe”.
A este elenco provisional redactado anualmente por la Agencia Fides, debe añadirse siempre la larga lista de aquellas personas de las que quizás nunca se tendrá noticia, que en cada ángulo del planeta sufren y pagan incluso con la vida su fe en Cristo, son esa “nube de soldados desconocidos de la gran causa de Dios” como decía el Papa Juan Pablo II.
AMÉRICA
En América han sido asesinados 6 sacerdotes: 2 en Brasil; 2 en México; 1 en Colombia; 1 en Guatemala.
En Brasil ha sido asesinado en su casa el sacerdote italiano Fidei donum don Luigi Plebani. Mientras que don Eduardo Teixeira ha sido asesinado en la calle, durante el transcurso de un robo.
En México han muerto don Jenaro Aviña García, asesinado en su casa por unos ladrones, y don Teodoro Mariscal Rivas, encontrado atado de manos y pies y con una bolsa en la cabeza.
En Colombia ha sido asesinado durante un robo don Pablo Emilio Sánchez Albarracin.
En Guatemala ha muerto don David Donis Barrera, agredido y acuchillado después de un accidente de coche.
ÁFRICA
En África han sido asesinados 3 sacerdotes y 1 religiosa: 1 en la R.D.Congo; 1 en Mozambique; 1 en Tanzania; 1 en Madagascar.
En la R.D. del Congo ha muerto Sor Liliane Mapalayi, de la congregación de las Hermanas de la Caridad de Jesús y María, apuñalada en la escuela en la que trabajaba.
En Mozambico ha sido brutalmente asesinado el Misionero de la Consolación (IMC) p. Valentim Eduardo Camale, durante un robo en su misión.
En Tanzania ha perdido la vida don Anastasius Nsherenguzi, asesinado por algunos jóvenes que estaba tratando de separar durante una pelea.
En Madagascar ha sido asesinado durante un robo en la calle el jesuita p. Bruno Raharison (SJ).
ASIA
En Asia han sido 2 los Agentes pastorales que han perdido la vida: 1 sacerdote y una laica; respectivamente en el Líbano y en las Filipinas.
En el Líbano ha muerto el padre Elie Gergi al-Makdessi, de la Orden Libanesa Maronita, asesinado en la calle en un intento de robo.
En las Filipinas ha muerto la laica Conchita Francisco, agente pastoral, asesinada con arma de fuego por unos desconocidos ante la catedral católica de Bongao, donde poco antes había dirigido la oración del Rosario y participado en la Santa Misa.
La labor misionera es sólo un pequeña muestra de la titánica historia de la evangelización protagonizada por los misioneros que a lo largo de tantos siglos han puesto en marcha un desarrollo integral del hombre.
El anuncio del Evangelio no puede desligarse de la promoción humana del hombre y por eso lo misioneros se han convertido er los verdaderos protagonistas de desarrollo de estos pueblos. Han sido elegidos y enviados a servir a los demás, no son meros gestores de obras sociales. Enseñan en las escuelas, sanan en los hospitales, promocionan a la mujer en los países donde están completamente olvidadas y relegadas, se encargan de miles de niños abandonados, huérfanos y víctimas de conflictos armados, se trasladan a los campos de refugiados, acompañan y trabajan por esos grandes olvidados de la historia que son los pobres.
Sus vidas, como la de Jesús, representan un compromiso. Han comprometido sus vidas con los más pobres, con los que no tienen, con los que no pueden alzar su voz, con los que no saben, con todos aquellos a los que las sociedades más avanzadas han convertido en números estadísticos.
Un famoso periodista los definió como obstinados, audaces, abnegados... hombres y mujeres llenos de coraje y entrega que se encuentran siempre en los lugares más castigados del planeta, en cada uno de los infiernos que se abren sobre la faz de la tierra. Hombres y mujeres sencillos que luchan como humanamente pueden contra las consecuencias de luchas políticas o intereses económicos que les son ajenos, poniéndose siempre del lado de los más pobres, cumpliendo su vocación y la llamada de la misión fuera de su patria.
Los catequistas, los religiosos, los párrocos, los animadores misioneros y todos en general debemos hacer que niños, jóvenes y adultos vean la importancia de la labor de los 25.000 misioneros españoles repartidos por todo el mundo y que descubran que estamos ante los 2000 años de la primera misión de la Iglesia.
Todos estamos llamados a ser misioneros en este Tercer Milenio siguiendo el ejemplo de Santa Teresita de Lisieux, San Francisco Javier y tantos otros misioneros santos que ha dado la historia de las misiones.
Los misioneros atienden: | Cantidad: |
Vicariatos apostólicos | 1.000 |
Seminarios | 1.000 |
Parroquias | 250.000 |
Instituciones de asistencia y beneficiencia | 112.053 |
Hospitales | 5.188 |
Ambulatorios o dispensarios | 17.157 |
Leproserías | 825 |
Hogares de ancianos y minusválidos | 12.209 |
Orfanatos | 8246 |
Guarderías infantiles | 10.344 |
Consultorios matrimoniales | 10.317 |
Centros de educación o reeducación | 11.347 |
Otras instituciones (Centros terminales de SIDA, Drogadicción, etc.) | 36.574 |
Como de costumbre, la Agencia Fides publica al final del año la lista de los agentes pastorales que han perdido la vida en modo violento durante los últimos 12 meses. Según las informaciones que tenemos, en el año 2012 han sido asesinados 12 agentes pastorales, casi todos sacerdotes, se trata de 10 sacerdotes, 1 religiosa, 1 laica.
Por cuarto año consecutivo, con el mayor número de agentes pastorales asesinados, en primer lugar se encuentra AMÉRICA, bañada por la sangre de seis sacerdotes. Le sigue ÁFRICA, donde fueron asesinados tres sacerdotes y una religiosa. Después ASIA, donde encontraron la muerte un sacerdote y una laica.
Como sucede desde hace tiempo, el recuento de Fides no hace referencia sólo a los misioneros ad gentes en sentido estricto, sino a todos los agentes pastorales muertos de forma violenta. Con respecto a estos solo usamos el término “mártires” en su sentido etimológico de “testigo”, para no entrar en mérito al juicio que la Iglesia podrá eventualmente dar sobre algunos de ellos, y también por las pocas noticias que, en la mayor parte de los casos, se logran recoger sobre su vida e incluso sobre las circunstancias de su muerte.
La mayor parte de los agentes pastorales asesinados en el 2012 ha perdido la vida a raíz de intentos de robo: algunos sorprendieron a los ladrones en su casa y sus cuerpos fueron encontrados con signos de haber sufrido tortura y crueldad. Otros fueron atacados en la calle y despojados de todo lo que tenían consigo o de su coche. La Hermana Liliane Mapalayi, fue apuñalada hasta la muerte mientras se encontraba en su puesto de trabajo en un instituto dirigido por su congregación, donde era la ecónoma.
Don David Donis Barrera fue agredido y apuñalado, después de un accidente leve, tras un altercado con los ocupantes del otro coche. Don Anastasio Nsherenguzi fue asesinado por unos jóvenes que estaban tratando de dividir durante una pelea. La laica Conchita Francisco recibió varios disparos de frente a la Catedral de Bongao, en el sur de Filipinas, donde se vive una gran tensión por la presencia de los rebeldes musulmanes, piratas, terroristas y criminales.
Como escribía el Santo Padre Benedicto XVI en el Motu Proprio “Porta fidei”, con el que convocó el Año de la fe que la Iglesia está celebrando, “Por la fe, hombres y mujeres han consagrado su vida a Cristo, dejando todo para vivir en la sencillez evangélica la obediencia, la pobreza y la castidad, signos concretos de la espera del Señor que no tarda en llegar. Por la fe, muchos cristianos han promovido acciones en favor de la justicia, para hacer concreta la palabra del Señor, que ha venido a proclamar la liberación de los oprimidos y un año de gracia para todos. Por la fe, hombres y mujeres de toda edad, cuyos nombres están escritos en el libro de la vida, han confesado a lo largo de los siglos la belleza de seguir al Señor Jesús allí donde se les llamaba a dar testimonio de su ser cristianos: en la familia, la profesión, la vida pública y el desempeño de los carismas y ministerios que se les confiaban”. (PF, 13)
Los Agentes pastorales asesinados en el año 2012 no han realizado actos sensacionalistas, no se han puesto en el centro de la atención de los medios de comunicación por proyectos o toma de posiciones espectaculares, sino que simplemente “han confesado la belleza de seguir al Señor Jesús donde eran llamados a dar testimonio de sus ser cristianos”.
Ellos vivieron su fe en la humildad de la vida cotidiana, especialmente en el contexto de la pobreza humana y espiritual, la degradación, la violencia, donde el respeto por la vida y la dignidad humana son valores que no se tienen en cuenta, tratando de llevar en estos ambientes su testimonio de amor, de ese amor del Padre que Jesucristo ha venido a mostrar.
El 26 de diciembre, el Papa Benedicto XVI ha recordado en el Ángelus que el martirio del diácono Esteban muestra que “el nacimiento del Hijo de Dios inauguró para la humanidad una nueva era, la del amor. El amor hace caer las barreras entre las personas. Nos hace hermanos...”. Después ha puesto bajo la intercesión de San Esteban a los cristianos perseguidos, pidiendo y orando por ellos, invitando a “perseverar sin temor en el testimonio de la fe”.
A este elenco provisional redactado anualmente por la Agencia Fides, debe añadirse siempre la larga lista de aquellas personas de las que quizás nunca se tendrá noticia, que en cada ángulo del planeta sufren y pagan incluso con la vida su fe en Cristo, son esa “nube de soldados desconocidos de la gran causa de Dios” como decía el Papa Juan Pablo II.
PANORAMA DE LOS CONTINENTES
AMÉRICA
En América han sido asesinados 6 sacerdotes: 2 en Brasil; 2 en México; 1 en Colombia; 1 en Guatemala.
En Brasil ha sido asesinado en su casa el sacerdote italiano Fidei donum don Luigi Plebani. Mientras que don Eduardo Teixeira ha sido asesinado en la calle, durante el transcurso de un robo.
En México han muerto don Jenaro Aviña García, asesinado en su casa por unos ladrones, y don Teodoro Mariscal Rivas, encontrado atado de manos y pies y con una bolsa en la cabeza.
En Colombia ha sido asesinado durante un robo don Pablo Emilio Sánchez Albarracin.
En Guatemala ha muerto don David Donis Barrera, agredido y acuchillado después de un accidente de coche.
ÁFRICA
En África han sido asesinados 3 sacerdotes y 1 religiosa: 1 en la R.D.Congo; 1 en Mozambique; 1 en Tanzania; 1 en Madagascar.
En la R.D. del Congo ha muerto Sor Liliane Mapalayi, de la congregación de las Hermanas de la Caridad de Jesús y María, apuñalada en la escuela en la que trabajaba.
En Mozambico ha sido brutalmente asesinado el Misionero de la Consolación (IMC) p. Valentim Eduardo Camale, durante un robo en su misión.
En Tanzania ha perdido la vida don Anastasius Nsherenguzi, asesinado por algunos jóvenes que estaba tratando de separar durante una pelea.
En Madagascar ha sido asesinado durante un robo en la calle el jesuita p. Bruno Raharison (SJ).
ASIA
En Asia han sido 2 los Agentes pastorales que han perdido la vida: 1 sacerdote y una laica; respectivamente en el Líbano y en las Filipinas.
En el Líbano ha muerto el padre Elie Gergi al-Makdessi, de la Orden Libanesa Maronita, asesinado en la calle en un intento de robo.
En las Filipinas ha muerto la laica Conchita Francisco, agente pastoral, asesinada con arma de fuego por unos desconocidos ante la catedral católica de Bongao, donde poco antes había dirigido la oración del Rosario y participado en la Santa Misa.